martes, 19 de agosto de 2014

Astérix y Obelix (1996, Multi)


Plataforma: PC
Género: Árcade
Año: 1996
Desarrolladora(s): Infogrames
Textos: Multi



Infogrames produjo algunos de mis juegos favoritos de la infancia, no recuerdo ninguno que me desagradara, y posiblemente no exista tal cosa. Obviamente Asterix y Obelix no iba a ser la excepción.

Me recuerdo leyendo con gran interés las historietas que venían junto a mi revista favorita a lo largo de la década del noventa. Esos eran tiempos en que el conocer el final de una aventura requería ser constante (ergo comprar todas las revistas del mes), ya que la historia se encontraba dividida por capítulos, y el perder solo una publicación equivalía a desentenderse irremediablemente del hilo argumental (si supieran las que pasé para conseguir el numero faltante de Asterix Legionario). No obstante, cada nueva edición incluía un resumen de lo acontecido en las semanas previas... dicha leyenda fallaba en evocar el sentimiento -y fundamentalmente las risas- que llegaban con la propia revista, pero servía maravillosamente a la hora de atar cabos entre una y otra publicación -recuerden que salían a la venta cada jueves, y a pocos nos quedaba la cabeza lo suficientemente entera como para recordar lo que acontecía en Galía-.

Ni bien me enteré de la existencia de este juego, quise poner inmediatamente mis manos sobre el. Pero no fue sino hasta hace unos pocos años que pude darme el gusto. Una vez que lo tuve, esto fue lo primero con lo que me encontré al iniciarlo -lo cual crea una excelente atmósfera pre juego, cosa que siempre se le ha dado bien a Infogrames-:

«Estamos en el año 50 antes de Cristo. Toda la Galia está ocupada por lo Romanos... ¿toda?.

¡No!, una aldea poblada por irreductibles galos resiste todavía y siempre al invasor.

Para mantenerlos prisioneros Cesar ha hecho construir una enorme empalizada en torno a la aldea.

Asterix y Obelix han decidido demostrarle a Cesar que pueden ir a donde les apetece y van a recorrer el Imperio Romano y traerle un recuerdo de cada país.»
.

Esa es básicamente la historia que nos presenta el juego, y si sabemos leer entre lineas, veremos que allí mismo está plasmado el objetivo del juego: conseguir un objeto representativo de cada recoveco del Imperio que visitemos.

Este no es un mal juego, pero los diseñadores se relajaron mas de lo usual con el. Mientras que en Lucky Luke el jugador se enfrentaba a varias situaciones en las cuales el ingenio iba por sobre la acción, en Asterix y Obelix la mayor parte de los problemas se resuelven golpeando algo... pero esto no es algo de lo que pueda necesariamente quejarse uno; al fin y al cabo el universo creado por René Goscinny y Albert Uderzo funcionaba exactamente así.

Dicho lo anterior, podríamos concluir que Asterix y Obelix es un árcade de raza pura (como, por poner un ejemplo, Golden Axe), pero tampoco es exactamente así... digamos que es mas bien un híbrido. Si bien es cierto que este juego va a su propio ritmo, y el objetivo del mismo es avanzar clásicamente por el nivel de izquierda a derecha, lo es a su vez que podemos influir un poco en el desarrollo de los acontecimientos del mismo.

Empezamos el primer nivel junto a Abraracúrcix (el jefe de la aldea) y Panorámix (el druida). Ni bien nos alejamos unos metros de ellos, y salimos de allí, podemos decidir si queremos tomar el camino o andar sobre las elevaciones del mismo. Cada ruta presenta sus propios peligros, y jamás pude discernir una clara diferencia entre una u otra, pero aun así es lindo que se nos presente la chance de elegir. Avanzamos el nivel machacando soldados romanos y jabalíes por igual (¿recuerdan el amor que le tiene Obelix a su carne?); no obstante las legiones del Cesar han aprendido por la experiencia y ahora atacan rápido (demasiado rápido diría yo) y vienen en parejas o se camuflan, lo cual los hace bastante difíciles de matar de forma indemne. Además si bien el juego tiene un set de dificultad para elegir, su mayor fallo lo tiene el motor de colisiones... tratando realmente duro, solo un par de veces logré matar algo sin que este me golpeara primero; ¡y la barra de vida de Obelix no es realmente tan generosa!.

Hay bastantes bloques luminosos que vienen a hacer la función de Powerups desperdigados por el escenario: la mayoría de ellos nos brindan puntos -al igual que el recoger los cascos de los soldados que venzamos (de nuevo, ¿alguno recuerda la inmensa colección de estos que ostenta el gordo del dúo?)- , pero otros (convenientemente dibujados como piernas de jabalí) nos ayudan a re ganar algo de vida.

Si la review hubiera concluido aquí, seguramente ya les hubiera dicho que este juego se queda muy por detrás de otros títulos de la compañía; y sus controles no configurables tampoco lo habrían ayudado (las clásicas flechitas están bien, pero ni la «B» ni la «V» me parecen teclas apropiadas para jugar). Pero es su inmensa calidad técnica la que consigue salvarlo -y hasta sumarle unos cuantos puntos- porque es simplemente genial.

Los gráficos son muy coloridos, están brillantemente animados y muestran un grandioso nivel de detalle para su resolución de 320x200. La música y los efectos de sonido no se quedan atrás tampoco... y el hecho de que Infogrames haya lanzado este juego con ejecutables tanto para Windows como para DOS dice mucho de su capacidad. Por otro lado, tampoco dejó desprovisto a este titulo de lo mejor que puede tener un árcade: el modo «coop» de dos jugadores.

Antes de empezar a escribir este análisis me puse a jugar con mi hermano de esa manera, y les puedo asegurar que realmente cambia la experiencia; además ayuda un montón a la hora de... ejem... no morir. Este es, en definitiva, uno de esos juegos en los que realmente se quiere tener a un segundo jugador.






En conclusión: Este juego me había decepcionado en un principio, pero con paciencia y un amigo a mi lado, realmente empecé a apreciarlo. Así que si te gustan los juegos para disfrutar en compañía, este es para vos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario